DEPORTES DE AGUA

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Ya estamos en verano y bien de vacaciones o en el tiempo libre una de las opciones más solicitadas por la mayoría es hacer una escapadita a la playa.

Con ello, los deportes de agua aumentan su práctica exponencialmente durante los meses de verano.

Prácticas deportivas como el Windsurf, Kitesurf, Wakeboard… son deportes que,  aunque son extremadamente divertidos, requieren de una técnica y una preparación física específicas para su práctica. Además el hecho de la existencia de practicantes ocasionales o estacionales de estos deportes incrementa en gran medida el número de lesiones por falta de preparación.

Previo al planteamiento del tratamiento vamos a hacer una pequeña introducción de estos deportes acuáticos subdividiéndolas en:

MIEMBRO INFERIOR, MIEMBRO SUPERIOR Y TRONCO.

MIEMBRO INFERIOR.

  • Esguinces y lesión de Lisfranc: en la mayoría de los casos suelen darse durante una caída, cuando uno de los pies queda enganchado a la tabla. Por ejemplo, en el Kitesurf, el kiter es arrojado de la tabla quedando el pie atrapado en el anclaje y la correa dando lugar a lesiones tanto ligamentosas como óseas.
  • Condropatía rotuliana: Dependiendo del grado puede ir desde inflamación a desgaste del cartílago retropatelar. Puede producirse por un episodio traumatológico (un fuerte impacto en la rodilla), o bien por un exceso de tensión en cuádriceps que impacte la rótula contra el fémur produciendo un rozamiento excesivo de las carillas articulares.
  • Meniscopatía: Lesiones meniscales, en estos deportes se exige una gran fuerza en el miembro inferior así como un movimiento repetitivo de flexo-extensión de rodilla.
  • Rotura del LCA: Las torsiones bruscas, la fijación de los pies y la desestabilización de la base, hacen de esta lesión una de las más importantes de éste tipo de deportes.

MIEMBRO SUPERIOR

  • Luxación de hombro y tendinopatía del manguito rotador:  En deportes como el kite o el wake en los que estamos sometiendo al hombro a una tracción excesivas, hay caídas a alta velocidad y en los que tenemos que hacer fuerza para equilibrarnos con un brazo de palanca muy largo.
  • Epicondilitis o codo de tenista: Debida a la alta cantidad de fuerza que se ejerce con los brazos y a que el agarre no es estable hay una lucha entre la musculatura flexora y extensora del antebrazo. También puede ocurrir el mismo proceso en la cara interna del codo (epitrocleitis). Estas lesiones son muy frecuentes en amateurs por uso excesivo, mala técnica,… aunque el sobre-entrenamiento por parte de los practicantes habituales no los libra de este tipo de lesiones.

TRONCO Y CUELLO

  • Latigazo cervical: lesión que se produce al caer al agua a gran velocidad, el impacto puede provocar una hiperflexión y una hiperextensión de la columna cervical.
  • Lumbalgia: Debida a la posición adoptada sobre la tabla y a las rotaciones de tronco que se realizan constantemente para reequilibrarnos sobre la tabla así como una mala repartición de las cargas.

PREVENCIÓN DE LESIONES

Hoy nos centraremos en plantear un trabajo preventivo para evitar muchas de las lesiones comentadas anteriormente.

Un buen trabajo propioceptivo que nos ayude a sentirnos cómodos sobre la tabla y que enseñe a nuestro cuerpo a reaccionar de manera oportuna y controlada ante desestabilizaciones bruscas, nos va a ayudar a disminuir considerablemente las probabilidades de sufrir una lesión de tipo ligamentoso.

Un trabajo especializado de estabilización escapulo-humeral, así como de la disociación de cinturas pélvica y escapular, junto una musculatura fuerte que soporte la tracción ofrecida sobre nuestros hombros. Podremos trabajar con una polea cónica o trabajo inercial para someter al cuerpo a las sensaciones que va a tener durante estas prácticas deportivas. Nuestro objetivo no es coger fuerza, es coger FUERZA ÚTIL.

Y por último un trabajo de la faja abdominal o transverso del abdomen, el gran olvidado de los abdominales y que es indispensable para que la zona lumbar comparta fuerzas con el abdomen haciendo que la misma sufra mucho menos.

Todo esto junto con una normalización periódica de la musculatura para eliminar rigideces que condicionen nuestra postura y la biomecánica de nuestro cuerpo, van a ayudarnos a prevenir todas las lesiones comentadas anteriormente.

¡Buen verano y buenas olas!